Despliegue de fuerzas de seguridad en Frontera y alrededores : Un show que llegó tarde

La reciente balacera que segó la vida de un niño inocente como ZAMIR  en Fronteara  ha generado una respuesta tardía y superficial por parte de las autoridades. El despliegue de fuerzas provinciales y federales para controlar el narcotráfico en nuestra pequeña ciudad es una medida que llega demasiado tarde.

La muerte de este niño es un trágico recordatorio de la inacción y la falta de previsión que ha caracterizado la respuesta gubernamental ante este problema. En lugar de tomar medidas preventivas y efectivas para abordar las raíces del narcotráfico, las autoridades parecen más interesadas en hacer un show mediático después del hecho. Nunca antes la seguridad estuvo tan mal como ahora .

Desplegar fuerzas después de la tragedia es una reacción instintiva, pero no es una solución. Es como cerrar la puerta del establo después de que el caballo ya se ha escapado. La verdadera pregunta es ¿por qué no se tomaron medidas antes de que esto sucediera? ¿Por qué no se invirtió en prevención, en educación y en programas de apoyo para jóvenes y familias vulnerables?.

La respuesta tardía de las autoridades no solo es ineficaz, sino que también puede ser contraproducente. Puede generar una sensación de falsa seguridad en la población, mientras que el problema subyacente sigue sin ser abordado. Es hora de que las autoridades asuman la responsabilidad y tomen medidas concretas y sostenidas para abordar el narcotráfico y la violencia en nuestra ciudad. La vida de nuestros niños y jóvenes vale más que un show mediático."