Pedido desesperado a la justicia de San Francisco : Papá hace 3 años no puede contactar a sus hijas que estaban con la madre en Buenos Aires

 Un hombre, Marcelo, papá de dos niñas de 11 y 14 años  de edad, hace 3 años que no tiene contacto presencial con sus hijas, y ya pasó un año aproximadamente desde que no tiene ni siquiera contacto telefónico con una tía materna de las niñas, que era la única persona que al menos le decía algo sobre ellas, por mínimo que sea. Pero ya hace tiempo que nadie responde las llamadas ni contesta los mensajes. Ni la progenitora, ni la tía, nadie.Así de dramática es la historia  tejida en un laberinto de papeles  en los Tribunales de  San Francisco, un abogado local  intenta todo para  lograr el reencuentro , mientras tanto un pregunta retumba  en la nada misma ¿ Dónde están las chicas? 

En su momento, el centro de vida de las niñas estaba en San Francisco, es decir, vivían en nuestra ciudad. La madre decide irse a vivir a la provincia de Buenos Aires, y por tal motivo hace una petición judicial en el fuero de familia. Se le otorga la autorización, y en consecuencia se radica en la referida provincia junto a las niñas, a finales del año 2022. Desde aquél momento Marcelo no ha tenido más contacto presencial con ellas, la progenitora ha impedido el contacto en numerosas oportunidades, y ni siquiera respondía las llamadas. El único contacto que solía responder a las preguntas del progenitor, era una tía materna de las niñas, que también vive en la provincia de Buenos Aires. Pero, ya hace prácticamente un año que la tía también “desapareció”.Argentina , un país donde las personas  desaparecen como si nada fuera . 

Hoy por hoy, y desde hace tiempo, este papá no sabe dónde están sus hijas, dónde viven, si están bien, si están pasando necesidades, hasta tiene un gran temor de que les haya pasado algo a las niñas. 

Marcelo hizo varias denuncias en estos años, reclamos, pero nadie abordó el caso con seriedad desde la Justicia ni desde los organismos oficiales de niñez. 

Este año, concretamente en el mes de enero, el padre radicó denuncia en la unidad judicial de esta ciudad. Se constituyó como querellante particular en la causa, con el patrocinio del Ab. Nicolás Casas, especialista en derecho de familia y niñez. 

Hubo demoras importantes, hasta que en el mes de mayo la Fiscalía de 4to Turno decide terminar con la causa porque considera que no es competente. Se remiten las actuaciones al Juzgado de Control, y con atinado criterio, el Juez de Control Dr. Girardi, manda a la Fiscalía a aportar mayor información, respecto a los antecedentes judiciales que obran en el fuero de familia, en el expediente en el que en definitiva se autorizó a la progenitora a llevarse a sus hijas a vivir a Buenos Aires. 

A todo esto, Marcelo sigue sin tener noticias de sus hijas. Sería una locura que se haga radicar la denuncia al progenitor en Buenos Aires. Lo ideal en este caso, sería que la fiscalía local comience a investigar y en su caso haga las conexiones necesarias con la provincia de Buenos Aires, para intentar dar con el paradero de las dos niñas. Por un conflicto de competencia, no se avanza en la investigación. La situación es cada vez más angustiante y preocupante. Marcelo no sabe nada sobre sus hijas. Desde hace mucho tiempo. 

Pide a gritos que más allá de la burocracia procesal, se actúe con urgencia y se hagan los trabajos necesarios para dar con el paradero de sus hijas. Teme realmente por la integridad de ellas. 

Esperaremos que en el transcurso de esta semana haya novedades desde la Fiscalía local. También se iniciaron contactos con Missing Children (asociación civil), para ver si pueden hacer circular las fotos de las niñas.