Todos los políticos sanfrancisqueños con pobre cosecha de votos y muy por abajo de sus referentes nacionales.

Las elecciones para intendente, gobernador y presidente dejaron varios puntos para analizar en San Francisco. Especialmente como los representantes locales no pudieron sumarse o hacerse fuertes como los candidatos nacionales que representaban, o como el propio intendente de la ciudad no fue el más votado a pesar de contar con toda estructura del PJ.  EL TIEMPO MULTIMEDIA
Pasadas las elecciones nacionales, últimas  previstas en nuestro país, las mismas dejaron en claro la disparidad del electorado a la hora de elegir y como ningún "político" fue capaz de traccionar votos o hacerse fuerte con los votos que sus candidatos nacionales terminaron obteniendo.
El primer claro ejemplo es el de "Juntos para el Cambio". En San Francisco, Luciano Stoppani siendo candidato a intendente alcanzó los 7.400 votos, mientras que Mauricio Macri sumó 25.000, más del triple que su representante en la ciudad.
El caso del intendente Aresca también es significativo. Para ganar la elección local sumó 17.500 votos (7.500 menos que Macri ahora en las presidenciales) comparándolo con otra fuerza y en otro acto eleccionario, pero que permite medir fuerzas. Pero dentro de su espacio también aportó poco. En las eleciones para gobernador, que se celebraron el mismo día que las de intendente, Juan Schiaretti consiguió 19.740 votos, unos 2.200 votos más que el propio intendente en su tierra, el cual armó una gran coalición para retener la ciudad y todo hacía preveer una elección récord a nivel local.
Otro claro ejemplo fueron los resultados de las presidenciales, donde Aresca apoyó la lista para diputados del peronismo cordobés y a ningún candidato a presidente. Allí consiguió  6.251 votos el 14,58%  del total en San Francisco, en promedio por debajo de lo que aportó el Departamento San Justo con el 17.91% de los votos y del total provincial que fue del 16,95%.
El caso del electo concejal Andrés Romero también aporta su parte. Sumó unos 2.800 votos en las elecciones municipales, mientras que su candidato a presidente (Alberto Fernández) por el mismo espacio alcanzó los 13.500 votos.
Estos resultados y sumatorias, si lo desglosamos y analizamos, podemos ver con claridad cómo ya no existe el poder territorial y la tracción de votos que supo ocurrir en muchas oportunidades.
Además de ésto, en todos los escenarios, Aresca no logró con su apoyo -siendo quién gobierna la ciudad desde hace seis años-, incluso estando Schiaretti en el cierre de campaña en nuestra ciudad apoyando a sus candidatos a diputado, mover el termómetro que lo ubique como un mandatario de peso en su territorio y dentro del propio PJ de cara a lo que se viene, donde nuevamente el gobierno local y provincial no estarán alineados con la nación -al menos por ahora- y con los cuestionamientos que el electo presidente Fernández ya realizó al peronismo de Córdoba, que fue el único que no se unió como ocurrió en el resto del país.
Para cerrar, podemos decir que si bien no competían entre sí, fueron elecciones distintas y en contextos distintos, Mauricio Macri fue el político más votado en todas las elecciones celebradas en este 2019 en San Francisco con 25.000 votos, segundo está el gobernador Schiaretti que sumó 19.740, tercero Ignacio García Aresca con 17.500 votos  y cuarto el presidente electo Alberto Fernández con 13.500.
Estos números dejan claro como eligieron los sanfrancisqueños y sus preferencias. Llamativamente, el intendente electo que asumirá en diciembre próximo se encuentra tercero en la cantidad de votos obtenidos, a pesar de ser gobierno, de unirse con quién era su oposición en la ciudad y de poder contar con toda la estructura del PJ de San Francisco, lo cual no es poca cosa. En definitiva, los representantes locales levan menos gente que..