La familia que se repone del Coronavirus en Luxardo contó como son sus días con cuidados y la libertad del campo.

Un relato que muestra el mapa del virus y lo imponderable, una madre con super defensas y la ventaja de los peques.

REGIONALES 04 de septiembre de 2020 Pérez Darío Eduardo Pérez Darío Eduardo
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El  aire  del campo  en la  zona  de  Luxardo  es  mas  puro  que  en  la  ciudad y  ayuda  pasar los días  del aislamiento  a  una  familia  que se pezcó  el bicho en  San Francisco con  la  forma menos  pensada. En  la  media  tarde del  viernes  una llamada de  wasap  abrió  la  charla  con FMR90.7 ,  es otra  HISTORIA DE LA PANDEMIA..

X  tiene  40 años  un ex-camionero  que  vive  con su  mujer  y  los  pekes, una  de  2, otra de  7 y  el  hijo  de  17 años; juntos  abandonaron  San Francisco atraídos  por   un  tambo en Luxardo  donde   " la  pasamos  bien,  aquí se  vive  distinto  a la  ciudad ". La primera  frase  del hombre  y su tranquilidad  para  hablar son  consecuencia  de  un  aislamiento  pero  en  libertad  " Yo  trabajo  todos los  días  a un ritmo  más  lento  ,  en  poco  tiempo  estaré   como  antes" agrega  nuestro  amigo.

El  dato  desconcertante es  que  su  mujer es  la  única de la  familia  que  no  se  contagió del virus   y  está  como  siempre , incluso  le  da  el  pecho  a  la más  chiquita, los hijos   no  tienen  síntomas  y  su  vida  es  como  si  nada  hubiese  pasado,  aunque  pasó ¿ Y  como  empezó todo ? .  X.  recuerda  que  hace  unos  días  , Z.  la  bebé de la  familia  estuvo   en  la casa  de un  familiar  en  San Francisco que sin saber estaba cóntagiado de Covid  " "Yo  la  fui  a  buscar  en  el  auto,  Ella  lo tenía  y  nos  contagiamos  todos , menos  mi señora. Un  par  de días  depues  empecé  con  los  síntomas  y  justo me  contacta desde el Hospital  la  doctora  Verónica  Pepino y enseguida  nos  aislamos ", agrega.

Una semana más tarde   agradece  la vida  campestre " aquí  estamos aislados pero  tengo  todo  el campo  para  recorrer,  la  doctora  ( Pepino) nos  llama  todós días para saber  como estamos,  el  patrón  nos  acerca  lo  que  necesitamos ,  sería  muy  distinto  pasar  por  esto  en la ciudad"  y  agrega  " desde que  vivimos  aquí no nos  enfermamos mas de  nada,  esto  del Coronavirus no  es culpa  de nadie  ,  te  equivocás un  poquito  y  chau",sentencia con absoluta claridad.  Para  el  final pidió" que  los  padres  cuiden  a sus  hijos, a  cualquiera  le  puede  pasar,  hay  que cuidarse".

Todos  son contactos  estrechos de  un  contagiado de   San  Francisco  que   a su vez  es  una  rama  del  mismo árbol  de  contagio  de  nuestra  ciudad  y  Frontera, así  funciona  esta  loca   infección  que  nos  quita  la alegría    a  todes  , menos  a  esta  famlia  que  con  el viento como testigo  cuenta  las horas  para terminar  la cuarentena  y  al mismo  tiempo  disfruta  de  esos  increíbles  animales que  son las  vacas , únicas  testigos  de  esta   corono-historia  con   esperable  final  feliz  en  un  Luxardo  que se  lo merece después  de tantas  amarguras. Ojalá  pronto llegue  la esperada vacuna  y    sea  sólo   una HISTORIA DE LA PANDEMIA.

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